El RB Leipzig perdió por segunda vez en cuatro semanas ante el VfL Wolfsburgo, un equipo en apuros. 25 días después de ser eliminado de la Copa DFB, el equipo de Marco Rose también perdió 2:1 (1:1) en el Volkswagen Arena el sábado, cayendo fuera de los puestos de Liga de Campeones en la Bundesliga una vez más.
En esta ocasión, el VfL se adelantó pronto ante 25.350 espectadores: Jonas Wind marcó en el minuto 9 el 1:0. El Leipzig dominó el partido y atacó sin descanso. Pero sólo 14 minutos después del merecido empate de Yussuf Poulsen (minuto 52), el brasileño Rogerio (minuto 66) marcó el afortunado 2:1 para el Wolfsburgo. Para el club de Volkswagen, esto puso fin a una racha negativa de cinco partidos de Bundesliga sin ganar.
La pregunta más emocionante en el VfL estas semanas siempre la responde el entrenador Niko Kovac antes del saque inicial: ¿Quién jugará? Quién no va a jugar? El ex entrenador del Bayern ha sido criticado en Wolfsburgo por cambiar constantemente de táctica y de personal.
Esta vez, Maximilian Arnold tuvo que salir desde el banquillo contra el Werder Bremen (2:2) y volver al once inicial en Mönchengladbach (0:4). El jugador de 29 años es especialmente crítico con las rotaciones de Kovac y el manejo del capitán, canterano y jugador récord de la Bundesliga, es también un tema político particular en Wolfsburgo.
El entrenador intentó borrar este asunto de la mesa antes del partido ("Nosotros no elegimos la alineación"). Pero el descontento de muchos aficionados y la disonancia con algunos jugadores ya no pueden pasarse por alto.
Después de todo, el Wolfsburgo ofreció una actuación muy comprometida y por momentos apasionada contra el Leipzig. Se lanzaron a cada tiro a puerta y lucharon con gran físico. Sin embargo, a partir del minuto 20, eso apenas sirvió de nada. A partir de ese momento, las ventajas del Leipzig en cuanto a ritmo, técnica y estilo de juego fueron evidentes.
Christoph Baumgartner (20), Poulsen (20), el casi imparable Lois Openda (27) y Benjamin Henrichs (39) desaprovecharon buenas oportunidades para empatar 1-1 antes del descanso, y tras el empate, la proliferación de ocasiones de Openda (56/60) y Poulsen (60) se hizo aún mayor. Los visitantes deberían haberse adelantado hace tiempo en este partido de un solo lado cuando de repente se encontraron de nuevo por detrás.
Después de ir perdiendo 2-1, fue aún más difícil para ellos que después de encajar el primer gol. Los ataques del Leipzig ya no eran tan convincentes en los últimos 20 minutos. Openda desaprovechó la mejor ocasión para hacer de nuevo el 2-2 (79').
El belga adquirido por 38 millones de euros fue el jugador más llamativo del partido en todos los aspectos. Por su velocidad, sus ocasiones... y por un incidente en el minuto 31. En un principio, el árbitro señaló penalti a favor del VfL por una entrada a Sebastiaan Bornauw, del Wolfsburgo. Sin embargo, tras ver las imágenes de vídeo, anuló la decisión y mostró tarjeta amarilla a Openda por una falta. Esta acción estuvo en consonancia con toda la tarde del RB Leipzig.
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