Lusacia se está convirtiendo cada vez más en un foco de producción de baterías, también gracias al asentamiento de empresas como el Grupo Altech. El fabricante tecnológico quiere construir dos fábricas para este sector en el polígono industrial Schwarze Pumpe, en el sur de Brandeburgo. Según Uwe Ahrens, miembro del consejo de administración, los planos detallados de las fábricas deberían estar listos a finales de año. Incluyendo todas las fases de ampliación, el proyecto supone unas inversiones de más de mil millones de euros y 1.000 puestos de trabajo. Una vez finalizada la planificación, se "reunirán" las subvenciones, el capital propio y el ajeno, explicó Ahrens a la Deutsche Presse-Agentur. Sobre todo, ahora se toma la palabra a la UE en Bruselas con el Green Deal. El mercado de las baterías está emergiendo ahora. "Tenemos que estar allí en 2030"
Con el Green Deal ("Trato Verde"), la UE quiere llegar a ser climáticamente neutra en 2050. La estrategia incluye medidas en diversos ámbitos como la energía, el transporte, la industria y la agricultura.
Satisfechos con el apoyo en los estados federados
"En Bruselas no son tan rápidos como en Brandeburgo o en Sajonia", subraya Ahrens, que elogia a los gobiernos de los estados federados y también a las administraciones por el "excelente apoyo". Lusacia es un lugar ideal en muchos aspectos, afirma. "Aquí hay amabilidad industrial, terrenos baldíos, aquí se ha creado un cierto foco". El consejo de administración de Altech espera que todas las solicitudes en proceso de aprobación reciban decisiones positivas.
Altech quiere construir en el polígono industrial situado en la frontera entre Brandeburgo y Sajonia una planta para baterías cerámicas más avanzadas que no requieran materiales como el litio o el cobalto. Para ello, la empresa ha firmado un acuerdo con el Instituto Fraunhofer de Tecnologías y Sistemas Cerámicos (IKTS). Se trata de baterías para la red eléctrica. Según el IKTS, tiene una participación del 25 por ciento en la empresa conjunta.
Un tubo cerámico es el secreto
La particularidad de las llamadas baterías Cerenergy es que no contienen litio, cobalto, cobre ni grafito, explica el directivo de Altech. Según él, la novedosa batería de estado sólido incombustible consiste esencialmente en un tubo de cerámica en el que se introduce sal común en lugar de litio. Según Ahrens, se fabrica con materiales de la región. Debido a su peso y también a su volumen, la batería no es adecuada para su uso en electromovilidad, sino como dispositivo de almacenamiento de energía.
El segundo proyecto, una primera planta de producción de baterías para coches eléctricos, se pondrá en marcha como parque industrial en la frontera entre Brandeburgo y Sajonia antes de finales de este año, inicialmente con una producción anual de 100 megavatios-hora. La planta, a modo de proyecto piloto, producirá un nuevo tipo de material denominado "ánodos de siluma", que podrá utilizarse en las baterías de iones de litio de los coches eléctricos. Para ello, se recubrirán con cerámica, lo que debería hacer la batería más potente y duradera.
Ahrens dice que la empresa energética Leag también está interesada en trabajar con Altech. Con sus planes de construir una Gigafactoría -un enorme centro energético formado por plantas fotovoltaicas y eólicas en terrenos post-mineros- Leag también utilizará un gran sistema de baterías diferentes, dice. "Seguro que también baterías cerámicas, estoy firmemente convencido de ello"
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