El compositor Detlev Glanert no se imagina un mundo sin libros. "Soy un lector empedernido. Tengo una pila de unos 30 libros junto a la cama. Es mi dieta diaria", declaró este hombre de 63 años a la Agencia Alemana de Prensa. Actualmente está leyendo la fascinante biografía "Metternich", de Wolfram Siemann, recientemente publicada. Antes fue el nuevo libro de Christopher Clark sobre la revolución de 1848 ("Primavera de la revolución: Europa 1848/49 y la lucha por un nuevo mundo").
Sin embargo, no sólo le atrae el material histórico, sino también la ficción, admitió el artista, que es uno de los compositores de ópera más representados del mundo. Vuelve varias veces sobre los buenos libros y la poesía. "Leo los poemas de Rilke cada diez años. Es una obligación". La correspondencia entre Goethe y Schiller también volverá pronto: "Eso es fantástico".
La nueva obra de Glanert -la ópera "La judía de Toledo", basada en el drama homónimo de Franz Grillparzer- se estrenó en la Semperoper el pasado sábado y obtuvo una gran respuesta del público. El público aplaudió durante varios minutos.
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