La ministra de Sanidad, Petra Köpping (SPD), ha hecho un llamamiento a las mujeres embarazadas para que se abstengan de consumir alcohol. De lo contrario, existe el riesgo de que el niño sufra daños incurables, ha dicho con motivo del Día del Niño con Problemas de Alcohol, que se celebra este lunes. Los expertos hablan de trastornos del espectro alcohólico fetal (TEAF). Según el ministerio, cada año nacen en Sajonia entre 500 y 600 niños con FASD; en todo el país hay unos 10.000 recién nacidos.
Los síntomas incluyen malformaciones, retraso del crecimiento, enfermedades orgánicas, dificultades de aprendizaje, trastornos del desarrollo y problemas de comportamiento. Los daños no pueden curarse y afectan a los afectados para el resto de sus vidas, señaló. Köpping instó a las mujeres embarazadas: "Disfruten cada día de su embarazo; por la salud de su hijo, ¡no beban alcohol!"
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