El Ministerio Federal de Economía ha expresado su decepción por el cierre de la planta del fabricante de módulos solares Meyer Burger en Sajonia. "Las noticias de Freiberg son deprimentes", explicó el martes el secretario de Estado parlamentario, Michael Kellner. Añadió que eran conscientes de la gravísima situación a la que se enfrentan las empresas solares alemanas y que mantenían un diálogo regular e intenso con la industria, especialmente con las compañías que producen en el este de Alemania.
Meyer Burger había sellado el cierre definitivo de su planta en Freiberg, Sajonia. Los aproximadamente 500 empleados recibieron su preaviso. La empresa lleva tiempo quejándose de la competencia de los módulos baratos procedentes de China. La decisión vino precedida por el rechazo del ministro de Economía, Christian Lindner (FDP), a la llamada prima de resistencia, que pretendía proteger a los fabricantes sometidos a presión en Europa.
El político verde Kellner declaró: "Es muy lamentable que esto no vaya a ocurrir ahora. Aunque aún no se haya negociado todo, el escepticismo del socio de coalición sigue siendo desgraciadamente demasiado grande." No cejarán en su empeño y harán campaña para conseguir otras oportunidades de financiación a nivel de la UE.
Según el Ministerio, el Gobierno alemán está utilizando diversos instrumentos y palancas para reforzar las capacidades de producción en Alemania y Europa. En particular, hay margen de maniobra en la legislación europea sobre ayudas estatales.
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