La ampliación de la fábrica de Infineon en el norte de Dresde avanza: el fabricante de chips ha iniciado la fase final de construcción de la "Smart Power Fab". Poco más de un año después del inicio de las obras, el Ministro Presidente Michael Kretschmer entregó el jueves el último permiso de construcción pendiente. Kretschmer felicitó a la empresa. "El objetivo en Europa es que podamos beneficiarnos más de este importante mercado en crecimiento de la microelectrónica, que no sólo compremos a otras regiones del mundo, sino que la creación de valor tenga lugar aquí, los empleados estén empleados aquí, las innovaciones tengan lugar aquí", dijo Kretschmer. Para alcanzar el objetivo europeo de una cuota del 20% del mercado mundial, se necesitan fábricas como la de Dresde.
"Estamos dentro del presupuesto, tanto en términos de tiempo como de dinero", dijo Raik Brettschneider, Vicepresidente de la planta de Dresde. Infineon está invirtiendo un total de 5.000 millones de euros en la ampliación de la fábrica. Ahora que se ha concedido la licencia de obras definitiva, puede empezar la construcción. La excavación del foso ya ha concluido. Para ello se han excavado 450.000 metros cúbicos de tierra, lo que equivale al volumen de 180 piscinas olímpicas. El foso de excavación tiene 22 metros de profundidad y sirve de base para la losa de cimentación de hormigón, que tiene un grosor de hasta 190 centímetros y debería reducir al mínimo las vibraciones del paso de los tranvías, por ejemplo, para no interrumpir la producción.
El inicio de la producción está previsto para 2026. Según la empresa, la mayor fábrica de chips de Europa estará ubicada en Dresde en el momento de su apertura. La nueva fábrica fabricará semiconductores que fomentan la descarbonización y la digitalización. Se utilizarán en la industria del automóvil y en el sector de las energías renovables. Se espera que la ampliación cree unos 1.000 nuevos puestos de trabajo.
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