Incluso a sus casi 60 años y con la experiencia de muchos cargos de entrenador, a Pavel Dotchev no le dejan de afectar los derbis. Y tras la victoria por 3-2 en Hallescher FC, el entrenador del FC Erzgebirge Aue tendrá dos de ellos. El domingo (16:30/Magentasport), los Veilchen reciben al Dynamo Dresden, segundo clasificado, en el derbi de Sajonia. "Todos estos partidos son muy especiales, no sólo para el club y los aficionados, sino para toda la región. No importa dónde estés. La tabla no importa", dijo el técnico de 58 años.
Después de la victoria del Dresde por 7:2 ante el Lübeck, era inmensamente importante para el Aue ganar en Halle. "Una derrota habría sido un verdadero hándicap. Esta victoria nos da mucha confianza", declaró Dotchev. El búlgaro debería estar especialmente satisfecho con la actuación de su equipo en la segunda parte, cuando los de Erzgebirge tomaron el control del partido y lo dominaron.
Niko Vukancic será baja definitiva para el derbi. El central sufrió una lesión en el hombro. Los exámenes posteriores tendrán que determinar si se trata de una fractura de clavícula o incluso de una fractura de la articulación acromioclavicular. En cualquier caso, estará de baja varias semanas. "El precio de la victoria ha sido muy alto", declaró Dotchev. En Halle, Erik Majetschak sustituyó a Vukancic.
El Aue está a seis puntos del tercer puesto, en puestos de descenso. Quizás todavía haya margen de mejora, el equipo tiene la actitud necesaria. En Halle se quedaron dos veces por detrás en el marcador, pero aun así ganaron. "Remontar dos veces y darle la vuelta al partido demuestra que somos sólidos como equipo", dijo el defensa Tim Danhof.
Y también consiguieron su primera victoria en Halle en 36 años, desde el 13 de marzo de 1988. "Es histórico", dijo el capitán Martin Männel, mirando su propio pasaporte: "Eso fue antes de que yo naciera". Más exactamente, tres días antes de que naciera Männel.
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