El vigente campeón, el RB Leipzig, ha quedado eliminado de la Copa DFB en la segunda ronda. Los campeones de Copa de los dos últimos años perdieron 1-0 (0-1) en el campo del VfL Wolfsburgo el martes por la noche, sufriendo su primera gran decepción de la presente temporada.
Ante 16.031 espectadores en el Volkswagen Arena de Wolfsburgo, Vaclav Cerny marcó el gol de la victoria para los de la Baja Sajonia (minuto 14). El Leipzig jugó en inferioridad numérica desde el minuto 55 porque Yussuf Poulsen había visto una tarjeta amarilla. Fue sólo la segunda victoria del Wolfsburgo en el sexto enfrentamiento copero entre ambos clubes.
Kocac había cambiado su equipo en ocho posiciones con respecto al decepcionante 2:3 en la Bundesliga del FC Augsburgo. Entre otros, el goleador Jonas Wind y el capitán Maximilian Arnold estaban inicialmente sólo en el banquillo. Wind arrastra problemas en el tendón de Aquiles desde hace algún tiempo. "Jonas sigue en buena forma, pero tenemos que tener cuidado. Tenemos que tratarle como a un huevo crudo", había dicho Kovac sobre el internacional danés antes del partido.
Incluso sin Wind, que ya ha marcado ocho goles en la Bundesliga y uno en la Copa esta temporada, el Wolfsburgo fue el equipo más peligroso en la primera parte. Cerny, que llegó procedente del FC Twente Enschede en verano, adelantó a los locales en el minuto 14 con un potente disparo a la escuadra tras un buen pase de Tiago Tomas.
Para Cerny fue su primer gol de la temporada con la camiseta del VfL. Antes del descanso, el checo pudo incluso haber ampliado la ventaja tras un fallo garrafal del ex jugador del Wolfsburgo Xaver Schlager.
Tras el descanso, los visitantes se debilitaron. Poulsen recibió una tarjeta amarilla por una falta totalmente innecesaria en la línea de medio campo, lo que obligó a los participantes en la Liga de Campeones a jugar más de media hora sin equipo. Sin embargo, el Wolfsburgo no supo sacar provecho de ello. Debido a muchas pérdidas de balón fáciles, la mayoría de las ocasiones de contraataque se esfumaron pronto.
Así que el Wolfsburgo, que recientemente había perdido tres veces seguidas en la liga, tuvo que temblar hasta el final para progresar. Una de las razones fue que el suplente Wind sólo remató al poste en el tiempo añadido. Sin embargo, el Leipzig no creó más ocasiones de gol, a pesar de que el entrenador Marco Rose volvió a movilizar a todas sus fuerzas ofensivas.
Copyright 2023, dpa (www.dpa.de). Todos los derechos reservados