Según su propia información, el Centro de Asesoramiento al Consumidor de Sajonia ha detectado claras infracciones legales en algunos casos de aumentos de tarifas en residencias geriátricas. "A menudo, las cartas de aumento de tarifas son poco claras, poco transparentes o no cumplen con los requisitos formales", dijo Micaela Schwanenberg, asesora del equipo jurídico del Centro de Consumidores de Sajonia, según un comunicado.
No se respetan los plazos legales y se ignoran principios jurídicos fundamentales. Las cláusulas contractuales tampoco son siempre legales, según el comunicado. El centro de asesoramiento al consumidor hace un llamamiento a las personas necesitadas de cuidados y a sus familiares para que presenten las cartas de aumento de tarifas actuales y los contratos de residencias asociados para su revisión. Según el comunicado, el objetivo es averiguar si las infracciones detectadas son casos aislados o si existe un problema sistemático.
Los residentes en residencias de ancianos pagan un copago por los cuidados y la asistencia, ya que el seguro de dependencia sólo cubre una parte de los gastos. Además, hay gastos de alojamiento, manutención e inversiones en las instalaciones. A 1 de enero de este año, según datos de la Asociación de Cajas de Sustitución del Seguro de Enfermedad de Sajonia, durante el primer año en una residencia había que pagar de su bolsillo una media de 2.381 euros al mes.
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