Numerosos farmacéuticos de los estados del este de Alemania se concentraron el miércoles en Dresde para protestar contra la política sanitaria del Gobierno federal. Según la Unión Federal de Asociaciones de Farmacéuticos Alemanes (ABDA), hasta 3.000 farmacias de Berlín, Brandeburgo, Sajonia, Sajonia-Anhalt y Turingia iban a permanecer cerradas en el marco de la protesta. Según las primeras estimaciones de los organizadores, más de 2.000 personas participaron en la manifestación.
"Nuestra protesta es una protesta por el futuro de las farmacias locales, por nuestros jóvenes y por nuestros pacientes", explicó Thomas Dittrich, presidente de la Asociación de Farmacéuticos de Sajonia. Se dirige contra los responsables de la toma de decisiones que "cuestionan el mandato de suministro como farmacias y quieren dejar de lado los ajustes financieros necesarios".
Los participantes en la protesta exigen más dinero, entre otras cosas. Según la ABDA, las farmacias están sometidas a una "inmensa presión económica". Los cuellos de botella en el suministro, el aumento de los costes de funcionamiento y la escasez de personal les están causando cada vez más problemas. Según la asociación, los salarios no han subido desde 2004. El número de farmacias en Alemania lleva años disminuyendo.
La protesta de los farmacéuticos en el este es la cuarta jornada de protesta organizada por la comunidad farmacéutica. Anteriormente, ya se habían celebrado concentraciones y cierres de farmacias en el norte, oeste y sur de Alemania en noviembre.
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