Timo Werner hizo el saque de honor en el estadio Alte Försterei. Antes había saludado a sus compañeros del RB Leipzig tras la victoria por 3-0 en el campo del Union Berlin. No había podido jugar ni un solo minuto en la importante victoria a domicilio en la Bundesliga. El siguiente golpe bajo apenas tres días después de que el seleccionador nacional, Hansi Flick, le expulsara para los próximos partidos internacionales del equipo nacional contra Japón y Francia.
No obstante, al atacante le espera trabajo en los próximos días. Y mucho trabajo. "Marco Rose, yo, todo el equipo, todo el club estaremos completamente detrás de él. Ha hecho mucho por el club, ha marcado goles importantes, ahora trabajaremos con él, le devolveremos las cosas y lo levantaremos, entonces seguirá siendo una parte importante de nuestro equipo", anunció el director deportivo del RB, Max Eberl, aún en Berlín.
El entrenador Rose también se mostró protector con el jugador de 27 años, que no marca desde abril y atraviesa su mayor crisis deportiva desde que regresó del Chelsea FC hace un año. "Es importante que Timo mantenga la cabeza alta, que siga en ello, que supere estas fases junto a nosotros. No es agradable, no es agradable", dijo el entrenador del RB al describir la situación.
Al mismo tiempo, Rose también se mostró un poco molesto por el foco público sobre Werner, teniendo en cuenta protagonistas de éxito en su plantilla como los goleadores Xavi Simons y Benjamin Sesko. "Hoy se puede escribir mucho sobre Sesko, sobre Simons, mucho sobre el rendimiento del equipo, pero entiendo que con el jugador Timo Werner, que ha hecho mucho por el club, que es internacional, por supuesto que haya preguntas. Eso forma parte de ello, es un deporte de gestión, de competición, puede afectar a cualquiera, incluso a un internacional alemán", dijo Rose.
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