La vendimia sigue en pleno apogeo en muchos lugares de Alemania. En algunas regiones vitivinícolas como el Palatinado o Sajonia, la vendimia ya ha concluido en gran parte, según Ernst Büscher, del Instituto Alemán del Vino de Bodenheim (Rheinhessen). Sin embargo, se espera que la vendimia continúe hasta la semana que viene, sobre todo en las regiones más septentrionales centradas en el Riesling. El Trollinger, en Württemberg, tampoco suele estar aún listo.
Debido a la caprichosa climatología, Büscher espera que la cosecha anual sea ligeramente inferior a la media de los últimos diez años, que es de 8,8 millones de hectolitros. La calidad cosechada hasta ahora es de buena a muy buena. Sajonia y Saale-Unstrut se han visto especialmente afectadas, donde sólo se espera una cuarta parte del volumen de cosecha habitual, debido principalmente a los daños causados por las heladas tardías.
En Rheingau y Rheinhessen aún quedan muchas uvas Riesling
En el Mosela, algunos viticultores acaban de empezar a vendimiar. "Todavía hay muchas uvas Riesling colgando en el Rheingau", dice Büscher. En Rheinhessen, los viticultores también siguen esperando sol para el Riesling e intentan ganar algunos grados Oechsle más en el viñedo. El calor del sol sigue siendo bueno para la maduración del sabor.
Los viticultores tuvieron un año muy intensivo en mano de obra, muchos tuvieron que cortar las hojas tres veces en lugar de las dos habituales y tuvieron que utilizar más fitosanitarios debido a las fuertes lluvias. Esto también provocó un nuevo aumento de los costes.
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