A pesar de los numerosos retos, la planta ICE de Leipzig se muestra optimista de cara al futuro con motivo de su 15º aniversario. "Nuestro objetivo es que los trenes vuelvan a circular sin fallos", afirma el jefe de la planta ICE, Klaus Adamsen-Buttkus. Sin embargo, esto requiere una cuidadosa planificación previa, una tarea que se complica aún más por los frecuentes retrasos de Deutsche Bahn.
Modernización con efectos en Leipzig
"El ferrocarril no va bien en estos momentos", admite el responsable. El motivo es la infraestructura de la red, que "no es óptima" debido a años de abandono. No obstante, el Grupo trabaja a toda máquina para mejorar la situación: La infraestructura de la red se modernizará por completo de aquí a 2027. Ya se ha dado un primer paso importante con la remodelación general del ferrocarril Riedbahn entre Fráncfort del Meno y Mannheim.
Objetivo: volver a estar en números negros lo antes posible
Alrededor de 300 empleados trabajan en la planta ICE de Leipzig y son responsables del mantenimiento de un total de 70 trenes. La de Leipzig es una de las nueve plantas centralizadas de Alemania. Además, también hay emplazamientos descentralizados, como el de Dresde, en Sajonia.
El ambicioso programa de reestructuración de Deutsche Bahn sigue un "calendario ajustado", como subraya Adamsen-Buttkus. El programa consta de tres prioridades claras: renovar la red principal, estabilizar las operaciones ferroviarias y reforzar la rentabilidad. El objetivo es volver a los números negros lo antes posible.
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